La Habana.- En un año sin grandes competiciones, pero igualmente muy activo para el atletismo mundial, el semifondista keniano David Rudisha y la saltadora de altura croata Blanka Vlasic se erigieron en las mayores atracciones.
Mientras el africano dejó atrás su condición de promesa en los 800 metros, la europea se consolidó como la más estable de su prueba en las últimas temporadas. Rudisha implantó en una semana dos récords universales, cuando la antigua cota parecía llamada a ingresar en la lista de los registros imposibles de quebrar.
El 22 de agosto, el campeón del orbe juvenil de 2006, recorrió la distancia en 1:41.09 minutos, dos centésimas más rápido que lo hecho por su compatriota Wilson Kipketer en ese mismo mes de 1997, cuando ya representaba a Dinamarca.
Apenas siete días después, el corredor de origen masai rebajó su primado a 1:41.01 en Rieti, Italia, lo cual le colocó como principal candidato para alzarse con el premio al mejor atleta masculino de la campaña.
Si a ello se suman su invicto en 12 carreras y su coronación en la debutante Liga de Diamante, era difícil rebatir sus merecimientos para quedarse con el pergamino de la Federación Internacional de ese deporte (IAAF), como a la postre ocurrió.
En la rama femenina el lauro finalmente recayó en manos de la croata Vlasic, quien se ratificó como la mejor saltadora de alto del planeta al protagonizar una contienda casi perfecta.
La balcánica vivió una temporada de ensueño, al imponerse en 18 de 20 competiciones -incluido el Mundial bajo techo de Doha-, vencer invicta en la Liga de Diamante, y luego cerrar con el esperado éxito en la también inédita Copa Continental, en su ciudad natal de Split.
La espigada y carismática atleta parece la única con alguna opción de pulverizar una de las plusmarcas más antiguas del atletismo, el 2.09 metros al aire libre de la búlgara Stefka Kostadinova, con 23 años de existencia.
HEGEMONIA DE ALLYSON FELIX
Otra de las mejores actuaciones individuales de la campaña tuvo como protagonista a la velocista estadounidense Allyson Felix, única triunfadora en dos especialidades (200 y 400 metros) en la Liga de Diamante, sustituta de la Liga Dorada.
Felix dominó con amplitud en ambas categorías para encabezar el desempeño de su país, vencedor en 11 pruebas, entre las que también destacaron los triunfos de Tyson Gay y Carmelita Jeter en los 100, David Oliver en los 110 con vallas y el saltador de longitud Dwight Phillips.
Las bajas por lesión de los jamaicanos Usain Bolt y Asafa Powell allanaron el camino de Gay, quien, luego de superar algunas dificultades físicas, encabezó el hectómetro y le propinó a Bolt su primer revés en esa distancia en dos años.
Aunque igualmente en ausencia del líder de su especialidad, el cubano Dayron Robles, Oliver brilló por sí solo en 2010, al bajar cinco veces de 13.00 segundos, incluido 12.89 y 12.90, muy cerca del primado del orbe (12.87), en poder del caribeño.
Otros ganadores de renombre fueron el jabalinista noruego Andreas Thorkildsen y su par checa Barbora Spotakova.
Kenia se agenció siete lauros, en tanto Francia -con dos- completó junto a Cuba las naciones con más de una corona.
Precisamente la mayor isla del Caribe lideró la labor de Latinoamérica, por intermedio de la triplista Yargelis Savigne y la discóbola Yarelis Barrios, mientras la brasileña Fabiana Murer completó su gran temporada con su éxito en la garrocha.
Además, los atletas cubanos comandaron a América Latina en el Mundial en sala en la capital qatarí, al ubicarse en el sexto puesto del medallero (1-3-1) y ocupar el tercero por puntos (47).
El título antillano lo aportó el campeón olímpico y recordista universal Dayron Robles, al vencer en los 60 con vallas, en tanto Savigne, su homólogo Yoandry Betanzos y William Collazo (400 metros) concluyeron como subcampeones, y el triplista David Giralt se alzó con el bronce.
Estados Unidos finalizó en la cima de ambas clasificaciones, gracias a sus ocho títulos, tres platas y seis bronces, y las 166 unidades. En la ubicación por medallas tuvo como escolta a Etiopía (3-0-2), mientras por puntos el segundo lugar quedó en manos de Rusia (104).
La sensación de la lid resultó el francés Teddy Tamgho, al establecer un nuevo primado del mundo bajo techo en el triple salto, con 17.90 metros.
El otro gran certamen por países de la contienda, la Copa Continental (antigua Copa del Mundo), tuvo un inesperado desenlace con la victoria del equipo Europa en Split.
La selección europea acumuló 429 puntos para desbancar al elenco de Américas (419.5), que salió como lógico favorito al contar con la potencia de los sprinters estadounidenses y caribeños, y la fuerza de Cuba en el campo, especialmente el triple salto.
El atletismo cubano cerró el año con la buena noticia de la elección de Santiago Antúnez -artífice de los triunfos de su país en los 110 con vallas- como mejor entrenador de la temporada.
Fuente: prensa latina
