Ezekiel Kemboi retuvo el cetro mundial de los 3.000 metros obstáculos y Kenia repitió doblete al situar segundo a Brimin Kipruto, mientras que Francia atemperó la dictadura africana con el bronce de Mahiedine Mekhissi-Benabbad y el cuarto puesto de Bob Tahri.
El equipo verdinegro contaba también con Kipruto, que sólo fue séptimo hace dos años pero ahora se presentaba con una impresionante marca, conseguida en Montecarlo, de 7:53.64, a una sola centésima del récord mundial del catarí Saif Shaheen.
"En Daegu intentaré batirlo", anunció entonces, pero su principal objetivo en los Mundiales era recuperar el título que le arrebató hace dos años su compañero Kemboi.
Los kenianos sólo dieron la cara en el tercer kilómetro. Antes el sudafricano había pasado en 2:47.63 el primer mil. Luego fue el ugandés de 18 años Jacob Araptany quien pasó el segundo kilómetro en 5:33.42. En la última vuelta Kemboi se mostró imbatible. Venció con 8:14.85, mientras a su espalda Kipruto le ganó a Mekhissi el pulso por la medalla de plata.
El tercer keniano, Richard Mateelong, bronce en Osaka y en los Juegos de Pekín, quedó en séptimo lugar.
Además de en Osaka 2007 con Kipruto, Kemboi y Mateelong, Kenia había conseguido otro triplete diez años antes, en Atenas'97, con Wilson Boit Kipketer, Moses Kiptanui y Bernard Barmasai.
En Berlín 2009 se lo impidió el francés Bouabdellah Tahri, recordman europeo con 8:01.18, que se colgó la medalla de bronce.