Considerada una de las tres pruebas de 21 kilómetros 97,5 metros más importantes de América Latina, la carrera del Día del Padre reunirá a unos 14.000 corredores y se espera una gran lucha entre Keter y Kimaiyo, quienes residen en el país.
Keter se impuso el año pasado con 1 hora 3 minutos y 58 segundos, un tiempo alejado de la lista mundial de la pasada temporada, pero bueno si se toma en cuenta que la prueba cuenta con par de pendientes largas a partir del kilómetro 15, en la cual los fondistas pasan su reto principal.
Este domingo, el africano deberá presentarse en su mejor forma para retener el título porque tendrá entre sus rivales a Kimaiyo, con un registro de 2 horas 08 minutos 17 segundos el año pasado en el maratón de Torreón.
Los kenianos Elisha Korir y Shadrack Kiyai y los mexicanos Julio César Pérez y Erick Pérez fueron confirmados hoy por el Comité Organizador como otros de los atletas de alto rendimiento contendientes por las medallas.
Dotada de una bolsa de premios de 497.000 pesos (unos 38.000 dólares), la carrera del Día del Padre es una de las más bellas de México, que suele transcurrir en un ambiente de fiesta, con miles de aficionados a lo largo del recorrido.
Por celebrarse en coincidencia con este día, muchas familias se desplazan a los puentes peatonales del sur de la capital mexicana por donde pasa la carrera para dar ánimo a sus allegados y al resto de los competidores.
En la prueba femenina no estará la doble campeona panamericana Marisol Romero, quien competirá este fin de semana en el Medio Maratón de Duluth, Minnesota, como parte de su preparación para los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
El título vacante tendrá algunas pretendientes de calidad, entre ellas las kenianas Rose Jebet y Alice Waruguru y a las mexicanas Angélica Sánchez y Dolores Valencia.
La carrera del Día del Padre, que transcurrirá a 2.240 metros sobre el mar, es una de las más de 600 pruebas de rutas programadas para este año en México, la mayoría en las pruebas de maratón, medio maratón y 10 kilómetros.
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