En el Líbano, existe un disparo en el año que no es una escena más de la violencia cotidiana: el disparo de salida de la Maratón Internacional de Beirut.
En una charla conmovedora, la fundadora de la maratón, May El-Khalil, explica por qué cree que una carrera de 42.195 metros puede unir a un país que ha estado dividido por la política y la religión durante décadas.
Al menos un día al año. Al menos durante una carrera. En esta charla muy ejemplificadora para TED de May El-Khalil, una corredora que, tras ser atropellada por un autobús mientras corría, pasó dos años hospitalizada y fue operada 36 veces.
Y fue en el hosopital donde tuvo la maravillosa idea del maratón de Beirut del que, como ella dice, su disparo de salida es el único arma de fuego que no forma parte de la violencia habitual. A través del ejemplo de los 42 kilómetros y 195 metros del maratón de la capital libanesa se une un país dividido durante décadas por la política y la religión que en 2012 congregó a más de 33.000 corredores.