Lograr dos récords del mundo en sólo cuatro días aumentaba la dificultad de la empresa. Si además la marca a superar no era de otra atleta sino propia, ya requería hacer una carrera casi perfecta.
Genzebe Dibaba fracasó en su intento de batir el mejor registro mundial de siempre en los 1.500 metros de pista cubierta al firmar 3:58.80 en la reunión 'Copernicus Cup', en Torun (Polonia), perteneciente al IAAF Wold Indoor Tour.
La etíope, que el martes pulverizó el récord del mundo de los 2.000 metros en Sabadell con 5:23.75, tenía el récord desde 2014, cuando hizo 3:55.17 en Karlsruhe. Con ese registro, sin embargo, sí se sitúa líder del año de la distancia.
Debía superar, por tanto, esa marca, pero pesaron en sus piernas los 2.000 metros de Sabadell, en los que tuvo la compañía de la liebre sólo hasta el ecuador de la prueba.Sin embargo, a Dibaba aún le queda un récord a superar, el de los 1.000 metros que atacará en la reunión Villa de Madrid, el próximo 24 de febrero. La etíope deberá correr en menos de 2:30.94, el registro que tiene en su poder la mozambiqueña María Lourdes Mutola, desde 1999.
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