Una taza de té. Esa fue la parca celebración de Eliud Kipchoge tras imponerse el pasado domingo en el Maratón de Londres por cuarta vez. El keniano, que no bebe alcohol, mostró su habitual modestia a la hora de valorar su triunfo con la segunda mejor marca de la historia: "Creo que hice una buena carrera".
Poco amigo de las declaraciones rimbombantes, Kipchoge sí dejó esta vez una declaración de intenciones que conviene tener muy en cuenta: "Confío en correr los Six Majors antes de retirarme".Hablaba, claro está, de los seis maratones más importantes del mundo, tres de los cuales ya ha disputado -y ganado-.
A saber: Chicago, Berlín y Londres. Le faltan pues los otros tres: Tokio, Boston y Nueva York.
Ni que decir tiene que ningún atleta ha ganado los seis grandes. El que más cerca se ha quedado ha sido el también keniano Wilson Kipsang -el único capaz de derrotar a Kipchoge-, que se impuso en Tokio, Londres, Berlín y Nueva York, pero que nunca ha corrido en Chicago y Boston.
Una vez lanzado el órdago, al rey del maratón le queda concretar su calendario porque por ahora se desconoce hasta qué otro maratón correrá este año. Kipchoge ya ha dicho que pretende defender su título olímpico en 2020 por lo que deberá mover ficha renunciando a Berlín este mismo año y a Londres el que viene si quiere hacer hueco a esos otros 'Majors'.
Eso, claro está, si desea disputarlos en el apogeo de su carrera con la clara intención de ganarlos. Lo único seguro, por ahora, es que el maratoniano más grande de la historia descansará durante dos o tres semanas antes de tomar una decisión. El mundo del atletismo aguarda expectante.
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